El público disfrutó un programa integrado por obras cumbres de la danza cubana e internacional, con los roles protagónicos de Viengsay Valdés, Anette Delgado, Sadaise Arencibia, Grettel Morejón, Dani Hernández, María Luisa Márquez y Ányelo Montero; secundados por solistas y el cuerpo de baile de la compañía.
Personas de todas las edades acudieron a un espectáculo de lujo que contó con un repertorio compuesto por «Tarde en la siesta», «Muto», Alfonsina», «Canto Vital», «La muerte del cisne» y escenas de «Cascanueces».
Jorge Luis Lezcano, quien asistió con su esposa, aseguró que siempre es una buena oportunidad de disfrutar de un símbolo de la cultura cubana; y de fomentar el buen arte desde edades tempranas.
Queremos seguir expandiendo a todas las provincias lo que el Ballet puede ofrecer, aseguró recientemente la primera bailarina Viengsay Valdés, su directora general.
Ayer fue la última presentación de la compañía en el territorio más occidental, donde sus integrantes han desarrollado un amplio programa de actividades que incluyó la inauguración de la exposición «Homenaje» en el Centro de Gestión Estratégica del Desarrollo Local.
La muestra cuenta con instantáneas captadas por fotógrafos de varias generaciones durante más de siete décadas.
Fundado por Alicia, Fernando y Alberto Alonso el 28 de octubre de 1948 el Ballet Nacional de Cuba constituye referente en el movimiento danzario internacional y fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación en 2018.
