La Comisión de Relaciones Internacionales del Parlamento de Cuba rechazó hoy la reciente declaración del Congreso de Estados Unidos sobre la isla, que calificó como injerencista y lesivo a la soberanía de la mayor de las Antillas.
De acuerdo con una nota emitida por el órgano legislativo, las acciones del Congreso están encaminadas a sustentar la guerra no convencional de Washington contra el país caribeño.
En ese sentido, el Parlamento condenó el pronunciamiento al tiempo que alertó a legisladores de todo el mundo acerca de estos planes y el incremento de la retórica agresiva y amenazante.
“Convocamos al amplio y diverso movimiento de solidaridad con la Revolución Cubana, que alcanza todos los rincones del planeta y tiene también sólidas bases en los Estados Unidos de América, como la historia ha demostrado”, señaló el documento.
Además, llamó a las asociaciones, grupos parlamentarios de amistad con Cuba y a las asociaciones de cubanos residentes en el exterior a alzar nuevamente sus voces para exigir respeto al pueblo cubano.
“No les asiste ningún derecho para interferir en los asuntos internos de Cuba, que solo competen a nuestro pueblo. Cuba nunca se pondrá de rodillas, ni aceptará órdenes de amo extranjero alguno”, agregó.
El 4 de noviembre último, el Congreso de Estados Unidos aprobó una resolución de apoyo a las acciones de desestabilización patrocinada por legisladores del estado de Florida.
Un grupo de 382 representantes respaldaron los disturbios ocurridos el pasado 11 de julio en la nación caribeña, cuando manifestantes incitados desde el exterior a partir de una campaña mediática y a través de redes sociales salieron a las calles y cometieron hechos violentos, según denunció La Habana.
Entre los promotores del texto sobresalen el republicano Mario Díaz-Balart y la demócrata Debbie Wasserman-Schultz.