El tres de abril es una fecha significativa para la oficialización de la Medicina Natural y Tradicional en Cuba, porque corresponde al momento en que el Comandante en Jefe Fidel Castro decide comenzar un programa de plantas y recursos naturales en pleno periodo especial, no como alternativa al proceso que se enfrentaría sino como otra opción para la salud cubana.
Los 30 años transcurridos desde entonces son una época de florecimiento de esta medicina, retomada en muchas partes del planeta porque se basa en los orígenes del ser humano y, a la larga, resulta inocua ante los efectos de la revolución de la química, que es muy válida como medio curativo pero está llena también de adversidades.
La floresta de la Isla inicialmente se utilizó para la práctica natural, pero a fines del siglo XIX comenzó el decaimiento del uso de las plantas medicinales por el desarrollo de la gran industria farmacéutica de la síntesis química y aunque trajo peores consecuencias al desarrollarse violentas reacciones adversas se impuso.
El comportamiento del medio ambiente y sus daños llevó de nuevo a los investigadores a fijarse en el mundo vegetal y los recursos naturales y tradicionales, incluido Fidel que siempre fue estudioso de los diversos procesos y sentía pasión por la medicina.
Entre los pinareños que sobresalieron desde el principio, tenemos al licenciado Carlos Callava, que aparte de farmacéutico es un reconoció estudioso y profesor de todas las prácticas de la medicina tradicional y al que se debe una amplia bibliografía.
El comportamiento universal a favor del tema se encuentra en 1979 cuando la revista Correo de la Unesco dedicó un número integro a Las plantas medicinales florecen denuevo y en Cuba, bien temprano, en 1973, se inaugura la Estación experimental de plantas medicinales, en La Habana, en colaboración con la URSS, República Democrática Alemana y otros países, bajo la dirección del Ministerio de Salud Pública.
Llegada la década de los años 80, con el aumento de la agresividad del gobierno de los Estados Unidos hubo toda una respuesta en la preparación de la población y se registraron movimientos políticos estratégicos. Fidel en Camagüey, en 1986, expresó que si algún día cayera el campo socialista, Cuba seguiría hacia adelante.
El Centro de información y divulgación agropecuario (CIDA), del Ministerio de la Agricultura, a instancias de la Estación experimental de plantas medicinales, editó los folletos Boletín de reseñas sobre plantas medicinales, desde 1982 hasta 1989 y en ese mismo año se fundó la revista Plantas medicinales, del CIDA.
Pinar del Río, que estuvo insertada desde el comienzo, en junio de ese año constituyó el Grupo Juan Tomas Roig dentro de las filas de las Brigadas Técnicas Juveniles.
En 1983 la Dirección de Medicina de la Academia de Ciencias de Cuba propuso un Anteproyecto de plan de acción de medicina tradicional y popular en Cuba, el cual fue aprobado y comenzó a realizar los primeros esfuerzos en este sentido. En 1985 pasó a ser rectorado por el Minsap bajo el nombre de Programa de medicina tradicional herbolaria en Cuba.
Y así fue avanzándose hasta que Fidel comprende que existía una base, un fundamento teórico, una experiencia y una formidable floresta que podría aprovechar el país, mientras que el General de Ejército Raúl Castro le da participación a las Fuerzas Armadas Revolucionarias como un complemento más al ambicioso plan que no solo pensaba en la población civil cubana en tiempos normales, sino como elemento para una hipotética guerra de todo el pueblo frente a un enemigo real.
Incluso, en las búsquedas de Callava, recuerda un pensamiento de José Martí, publicado en algunos de los folletos, que dice: “Preparar un pueblo para defenderse, y para vivir con honor, es el mejor modo de defenderlo”.
En 1985 se realizó, del 17 al 28 de mayo, una exposición de plantas medicinales con ejemplares vivos en la sede del Museo provincial de Historia de Pinar del Río, inaugurada por el general Samuel Rodiles Planas, entonces jefe del Ejército Occidental, y para ese momento se hicieron folletos divulgativos que se enviaron a todas las zonas de defensa de la provincia y se repitió la exposición en el año 2000.
En ese año, por iniciativa de la dirección del Partido en Vueltabajo, se decidió la siembra de módulos de 10 especies de plantas medicinales en la unidad de Tropas Especiales de El Cacho, municipio Los Palacios, y desde allí se distribuyeron cantidades para todas las zonas de montaña de la provincia; también en esa fecha se comenzó el cultivo expansivo de la manzanilla en la provincia con resultados positivos.
En los días finales de 1989, el territorio pinareño recibió la visita del General de Ejército Raúl Castro Ruz, quien al comprobar las condiciones y el cumplimiento de las tareas de la defensa y la producción y tomando en cuenta que la provincia había sido la primera en alcanzar la condición de Lista para la Defensa, propuso realizar un ejercicio donde se mostrara la preparación para la defensa y la producción, para lo cual fue seleccionado el municipio de San Cristóbal y en particular el hospital Comandante Pinares, para enfrentar el periodo especial en tiempo de paz.
Hay una publicación de la serie Información Especial de la editorial de Ciencias Médicas titulada La salud en periodo especial, experiencias de la provincia de Pinar del Río, con siete artículos que versan sobre sus logros.
El tres de febrero de 1991, Fidel en las conclusiones de la Asamblea provincial del Partido en La Habana dijo: “Estamos fomentando los cultivos de plantas aromáticas, de modo que en cada campamento haya un huerto. Un programa ha sido elaborado para que empresas y cooperativas suministren esas plantas aromáticas de condimento: ajo porro, cebollinos, otras, que hay muchas y que no las sabemos utilizar.
“Vamos a desarrollar ampliamente la producción de plantas medicinales, lo cual es una tendencia moderna, para aprovechar nuestros recursos en plantas medicinales. Vamos a hacer toda una industria, ya se está trabajando en eso. Es probable que surjan también algunas posibilidades de plantas de perfumería, como cultivos importantes y como cultivos útiles”.
Y seguidamente en el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, efectuado el tres de abril de 1991, se presentó la propuesta del Plan de desarrollo para la producción de plantas medicinales, aprobado con las observaciones hechas por el propio Comandante en Jefe, que a su vez planteó que era un programa para empezar, mientras se estudiaran lo precios y los productos, que este comenzaría por 20 plantas e insistió en desarrollar los cultivos más eficientes económicamente, o aquellos que no los vendiera nadie.
Señaló también que las plantas medicinales las queríamos no solo por razones científicas, sino por razones económicas, tanto para ahorrar medicamentos como para producirlos y exportarlos.
Durante el año 1991 los laboratorios que existían en las provincias y las farmacias comunitarias del país comenzaron la producción en mayor escala de los productos naturales, que son los actuales centros de producción local.
El avance fue exitoso y en 1995 se gradúan los primeros especialistas militares en Medicina Tradicional y Natural de las FAR, con la colaboración de profesores de China, Corea y Vietnam. Entonces la especialidad se comenzó a estudiar en el curso 1995-96 como parte de los esfuerzos del Minsap por extender el uso de tales técnicas.
Con la celebración del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, se discutieron los lineamientos y dentro de los de la Política Social el número 146 expresa; “Prestar la máxima atención al desarrollo de la medicina natural y tradicional”.
Durante la celebración del VII Congreso se actualizaron los lineamientos para el periodo 2016-2021, y corresponde el número 132 asegurar el plan de acciones para garantizar el desarrollo y consolidación de la Medicina Natural y Tradicional, aprobados por el III Pleno del Comité Central del Partido, el 18 de mayo de 2017, y respaldados por la Asamblea Nacional del Poder Popular, en julio de 2016 y el primero de junio de 2017.
La farmacia de medicina verde como decimos los pinareños nos proporciona la medicina natural que es muy demandada por la población, en lo personal me siento agradecida por el personal farmaceútico que se dedica a la investigación y elaboración de la gama de medicamentos, jarabes, unguentos y son tan aceptados por nosotros esperemos pase esta pandemia para que productos que no han podido expender por défici de materias primas se recuperen.
Hola buenas noches, les escribo del estado de Tabasco México, estoy interesada enun curso de medicina natural, sobre todo de las plantas medicinales.
Mé pueden ayudar a elegir un lugar donde pueda entrar enun curso o conocer a alguien como el licenciado Carlos Callava?
Quedo al pendiente de su resuesta