La campaña tabacalera 2020-2021 avanza por buen sendero, según avizora el buen secado de las hojas resguardadas en las casas de cura y la lozanía de las plantaciones existentes en las vegas pinareñas, reconocidas en el mundo por la calidad de la solanácea que en ellas se cultiva.
Virginio Morales Novo, especialista agrícola del grupo TABACUBA, afirmó que marchan bien todas las variedades de tabaco sembradas en la actual contienda, pese a las dificultades derivadas del bloqueo y la incidencia de la COVID-19 en la
disponibilidad de fuerza de trabajo.
Al respecto destacó el riguroso cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos, tanto en las labores en el campo como en
se lleva adelante el beneficio del tabaco, con dos mil 784 toneladas (t) procesadas, para el 94 por ciento (%) de cumplimiento del plan previsto para la etapa, según datos operativos.
La recolección registra buen ritmo –dijo– y sobrepasa los nueve millones de cujes de tabaco, en tanto se vislumbran buenos rendimientos, sobre todo, en las áreas con riego garantizado.
Con el optimismo visible en su rostro, aseguró que ya comenzó a acopiarse la materia primera de la actual campaña, matizada por el extraordinario esfuerzo de los productores, quienes se sobrepusieron a las iniciales adversidades climáticas y buscaron alternativas ante cada obstáculo.
Ya comenzó el tiro de recursos forestales y aunque no se alcanza el ritmo requerido, están en marcha la construcción de aposentos y las reparaciones de la infraestructura necesaria para responder a crecimientos paulatinos previstos en la rama.
En esta compleja contienda, los cosecheros de Vueltabajo plantaron más de 16 mil 800 hectáreas (ha) –de ellas 551 perdidas– y sobrepasaron el plan, ascendente a 15 mil 800 ha.
Pinar del Río es la provincia mayor productora de tabaco en Cuba y garantiza a la industria del torcido la totalidad de los capotes, tripas y volúmenes de capas que revisten a los afamados habanos.
