Pinar del Río – Después de Idalia, el diluvio. Como en el célebre relato de la biblia, Pinar del Río despierta con la sensación de que «todas las fuentes del grande abismo fueron rotas, y abiertas las cataratas de los cielos».
Tal como había anunciado el Instituto de Meteorología, lo peor para Vueltabajo no ha sido la llegada de la tormenta tropical Idalia, sino lo que ha sucedido tras ella.
Una lluvia interminable con rachas de viento que han llegado a sobrepasar los 100 kilómetros por hora, parece ensañarse con un territorio que todavía no se repone del paso del huracán Ian hace menos de un año.
Antes de que este nuevo fenómeno hidrometeorológico tocara suelo cubano cerca del Cabo de San Antonio, en la provincia se contabilizaban unas 60 mil viviendas damnificadas por Ian, pendientes de solución.
Hoy esa cifra ha cambiado. Aunque los datos oficiales están aún por cuantificar, a simple vista se sabe que ha habido nuevos daños en el fondo habitacional del territorio y pérdidas en la agricultura.