A pesar de los estragos que causaron las lluvias de la tormenta tropical Idalia, sobre todo en los cultivos de plátano, y en medio de situaciones adversas con los recursos, trabas con los créditos a raíz del déficit de efectivo y los altos precios de los insumos, los productores de San Luis les devuelven el verdor a sus tierras.
Así se pudo constatar en un recorrido por áreas agrícolas de ese territorio, encabezado por Yamilé Ramos Cordero, primera secretaria del Partido en la provincia, y Eumelín González Sánchez, gobernador de Pinar del Río, quienes también se interesaron por la marcha de la campaña tabacalera en uno de los mayores productores de la hoja.
CON EL OJO EN LA ECONOMÍA
Reinier Aguilar Travieso ha sembrado tabaco negro toda su vida; sin embargo, el huracán Ian le arrancó de raíz las dos casas de cura que tenía desde la época de su abuelo. Ese fue uno de los motivos para que esta vez se inserte al proyecto Virginia, y también porque implica mayor facilidad a la hora de curar la hoja y prescinde de la fuerza de trabajo para el ensarte.
En la zona conocida como Luengo, a los cultivos varios que siembra, como arroz, boniato, yuca, frijol y maíz, incursiona en el plátano por primera ocasión, algo que le era imposible anteriormente, cuando el tabaco negro le ocupaba casi todo el tiempo. Reconoce que esta vuelve a ser una campaña difícil, pero que espera obtener los máximos rendimientos.
Al intercambiar con las autoridades de la provincia se refirió a que debe hacerse un análisis de la ficha de costo de algunos productos como es el caso del frijol y del precio al que se les pagan las producciones a los campesinos, teniendo en cuenta el alto valor de los insumos y la semilla.
Al respecto, Leobaldo Crespo Arias, productor de la CCS Mariana Grajales, considera que los altos precios de la comida solo se lograrán bajar cuando haya producción, por eso es fundamental buscar la forma de incrementar los cultivos y de pactar contratos atractivos de ambas partes que luego no repercutan en la población.
Este joven desmontó 62 hectáreas de tierra en la zona conocida como Buena Aroma, y todas sus producciones, que incluye cultivos varios y tabaco las tiene contratadas con la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco San Luis y la de Semillas del territorio.
“El tiempo está hasta ahora perfecto para el tabaco. El campesino que pierda la oportunidad de sembrar en este mes tiene casi el año perdido”.
San Luis tiene un plan de 2 270 hectáreas contempladas en el plan de la campaña 2023-2024, de ellas 240 de tapado, 1 920 de sol y alrededor de 100 incluidas en el proyecto Virginia.
VUELVE EL PLÁTANO A TIRADO
Las lluvias de Idalia, a finales de agosto pasado, devastaron más de 25 hectáreas de plátano en San Luis, sobre todo en el área de desarrollo agrícola Palmar Amarillo, ubicada en el Consejo Popular Buenavista.
Durante el recorrido por varias áreas de la zona de Tirado, las principales autoridades de la provincia compartieron con varios campesinos que bajo el sistema de siembra extradenso recuperan los sembrados de plátanos que no solo contribuirán al abastecimiento municipal, sino a programas asistenciales priorizados.
Osvaldo Hernández López (Pepe), asociado a la CCS Máximo Lugo y uno de los mayores productores de pimiento de la zona, este año se ha enfocado en el plátano, ya tiene adelantadas 4 000 plantas y espera sembrar mil más.
“Este sistema da muy buenos resultados, pero además yo soy muy “quimicoso” y lo atiendo bien, para que los rendimientos sean los que de verdad se esperan”, dijo.
Pero a pesar de la voluntad y el sacrificio, muchos de los campesinos encuentran obstáculos para hacer avanzar sus cultivos. Tal es el caso de Frank José Ortega Hernández, a quien le resulta muy difícil acelerar algunas labores y atenciones culturales debido a la escasa fuerza de trabajo y a la falta de efectivo para pagarla.
“Soy diabético e hipertenso, y desde las seis de la mañana estoy ‘dando machete’. Hay días en que no puedo ni alimentarme como lo requiere mi condición por no tener dinero para comprar lo que necesito, mucho menos para pagar a jornaleros, todo por no poder acceder a créditos bancarios”.
Amén de la compleja situación con el efectivo, Ramos Cordero llamó a que se haga una evaluación con las entidades pertinentes y entre todos intentar resolver problemas de ese tipo, que hoy impiden a los campesinos avanzar en las distintas etapas de la campaña.
Hoy, en la zona de Tirado, algunos productores incorporan la siembra de tabaco, para incrementar sus ganancias y de alguna manera también compensar los gastos que trae consigo la producción de los cultivos varios.
UNA CPA QUE SÍ PUEDE
Desde 1998 Dianelys Álvarez trabaja en una de las áreas de semilleros de la CPA Carlos Lóriga. Aunque el tabaco siempre ha reportado un plus en el salario, ella al igual que el resto de las mujeres que allí laboran, ahora perciben un cambio notable en su economía, pues han llegado a cobrar en una campaña hasta 70 000 CUP y 2 000 MLC.
Es esta una de las 12 áreas de las 43 hectáreas que dedican al cultivo del tabaco en la estructura. Según Leoncio Torres Cabrera, su presidente, iniciaron la siembra el dos de noviembre y ya tienen más de 800 canteros regados, 300 de ellos de la variedad Habana ’92 y el resto de Corojo 2012.
“Debemos llegar al 57 por ciento del plan en noviembre, para sembrar 15 ha en diciembre y concluir en enero sin problemas, además hemos recuperado nueve casas de cura y las tres que faltaban ya están iniciadas”, refirió Torres Cabrera.
De las 82 hectáreas totales de la CPA dedican 46 a la siembra de cultivos varios, sobre todo frijol, maíz, yuca, boniato, col, pepino y habichuela, productos que ya están sembrados, por lo que no prevén dificultades por cumplir con la campaña de frío al cierre de febrero.
“Por nuestra parte, no tenemos problemas para garantizar la alimentación de los trabajadores, de los asociados y para contribuir al abastecimiento del municipio de San Luis. Para nosotros es muy importante llevar a la par la campaña de frío y la de tabaco”, añadió.
En medio de tantas dificultades, los productores sanluiseños mantienen la voluntad de sembrar, lo vital será lograr que tanto esfuerzo y sacrificio se traduzca, después, en comida para el pueblo.