Pinar del Río constituye la provincia más afectada en Cuba por la incidencia de ciclones tropicales, de ahí que cada año el ejercicio popular Meteoro sea una oportunidad para puntualizar las capacidades a todos los niveles, de cara a enfrentar esos eventos.
La ubicación geográfica de Vueltabajo lo ha convertido en blanco histórico, con una huella de no pocas pérdidas al fondo habitacional y la agricultura, por eso la necesidad de establecer acciones para eliminar vulnerabilidades y minimizar los posibles impactos.
En la jornada inicial del Meteoro se enfatizó en el quehacer del Centro de Dirección del Consejo de Defensa Provincial (CDP) y sus grupos de trabajo, el centro de comunicación, la organización de los posibles locales para la evacuación y la actividad de protección de los bienes de las personas y los recursos de la economía.
Pinar del Río cuenta con 12 centros de gestión para la reducción del riesgo de desastres y 59 puntos de alerta temprana, fortalezas para asumir cada temporada ciclónica, que se extiende en Cuba del primero de junio al 30 de noviembre.
Ejercicio #Meteoro2022 en #PinardelRío
— Evelyn Corbillón Díaz (@evecdACN_Cuba) May 21, 2022
👉Se puntualizan las capacidades para enfrentar huracanes de gran intensidad, sequía, sismos y eventos de desastres de origen natural
👉En los últimos 20 años, 17 ciclones tropicales han afectado la provincia de alguna manera #ACNreporta pic.twitter.com/qcd325a8rp
Este año los especialistas avizoran que se trate de un periodo activo, por eso la urgencia de prepararse independientemente de la experiencia acumulada y la sapiencia popular.
El doctor en Ciencias Juan Miguel Díaz Díaz, especialista del Centro Meteorológico Provincial, explicó que el territorio dispone de la infraestructura requerida para la vigilancia meteorológica, pues se mantienen en óptimas condiciones las siete estaciones y el radar de La Bajada.
Al 65 por ciento de su índice de llenado se encuentran los embalses pinareños y es bueno el estado técnico de las obras hidráulicas, según Ismael Valdés Chirino, delegado de Recursos Hidráulicos.
Actualmente, cerca del 27 por ciento del fondo habitacional de la provincia se clasifica de regular y malo; mientras unas seis mil viviendas quedan pendientes de solución de ciclones tropicales, desde 2002 hasta la fecha.
Yamilé Ramos Cordero, presidenta del CDP, insistió en la importancia de que el territorio se encuentre en una situación favorable para enfrentar la actual temporada ciclónica y de asegurar la información oportuna a la población.
Permanecen más frescos en la memoria de los lugareños los huracanes Gustav e Ike de 2008, los cuales en apenas 10 días de distancia temporal dejaron a su paso daños en más de 120 mil viviendas, sobre todo en los municipios de Los Palacios y San Cristóbal, este último perteneciente ahora a la provincia de Artemisa.