En 1999 se inscribía el Valle de Viñales en la lista de Patrimonio Mundial bajo el criterio de “ofrecer un ejemplo eminente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico, tecnológico o paisaje que ilustra una etapa significativa de la historia humana.
Desde aquel momento, el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) llamaba la atención sobre los cambios que el desarrollo del turismo traería a la región, por ello recomendaban, entre otros aspectos, “tener un programa para recopilar tradiciones orales y patrimonio inmaterial, con miras a preservar la memoria de este extraordinario asentamiento humano, en las esferas de música, artesanía y otras expresiones de la cultura popular”.
Dos décadas después de aquella declaratoria, el turismo en el Valle de Viñales ha tenido un impacto directo en la economía cubana gracias a la correcta gestión y coordinación integrada de varias entidades, organismos y la comunidad en general.
Por eso, en aras de preservar el valor excepcional de paisaje cultural y universal del sitio, que incluye elementos fundamentales como el auge histórico de la producción tabacalera mediante métodos tradicionales, junto a manifestaciones vernáculas de la arquitectura y la cultura inmaterial, se diseñó la Estrategia de Turismo Comunitario Sostenible del Valle, la cual está actualmente en fase de implementación.
Según el arquitecto Antonio Luis Mena Quiñones, especialista de la Oficina para la Gestión y Manejo del Valle de Viñales, el proyecto es el resultado de un esfuerzo mancomunado entre el Consejo Nacional de Patrimonio, la Unesco, las autoridades locales, provinciales y nacionales y, por supuesto, la comunidad. Además, en él intervienen los ministerios de Cultura, Turismo y Agricultura y el Instituto de Planificación Física.
Destaca el especialista que también contribuye directamente a la implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, a la Nueva Agenda Urbana y al Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030.
POR EL BIEN DEL VALLE
Cinco grandes líneas de trabajo conforman la estrategia, todas con el único propósito de garantizar el bienestar de la comunidad y el disfrute, por las generaciones futuras, del patrimonio natural y cultural del Valle de Viñales.
Sobre el trabajo que desarrolla la Oficina en su implementación, detalla Mena: “En el 2019, como parte de la celebración del vigésimo aniversario de la declaratoria del Valle de Viñales como Paisaje Cultural de la Humanidad, se realizó la primera edición del festival de tradiciones Viñales, valle vivo.
“La intención no era otra que a través de la gastronomía como pretexto – por existir un fuerte corredor gastronómico en el sitio y el poblado, con más de 90 paladares y restaurantes estatales- mostrar el valor excepcional del Valle de Viñales, su integridad y autenticidad.
“Entre los objetivos trazados para este festival estaba el de contribuir a la Estrategia de turismo sostenible y visualizar los atributos por los que se le confirió la declaratoria.
“Una vez concluida la primera edición, nos dimos a la tarea de preparar la segunda, esta vez para resaltar otro de los valores inmateriales: las tradiciones orales, fundamentalmente la décima que encuentran su máxima expresión en Benito El Viñalero y Tite Sarabia, como continuador de la tradición.
“Conscientes de la necesidad de profundizar en su rescate, celebramos, en el mes de febrero un taller de la décima que tuvo como invitado a Luis Paz (Papillo), presidente de la Academia iberoamericana de la décima y el verso improvisado, a fin de lograr pedagógicamente una fórmula para crear una cátedra de la décima en Viñales, según la experiencia de otras regiones de Cuba como Mayabeque. El taller fue un éxito, a la espera estamos de la reapertura del país para trabajar en el proyecto de la cátedra y a la espera también de la segunda edición del festival Viñales, valle vivo”.
Añade Mena que con el objetivo de implementar una de las líneas estratégicas, relacionada con lainvestigación, información y comunicación,la Oficina ha creado un portal de Facebook con el nombre de Viñales Patrimonio Mundial, en el que se han colocado, a modo de consulta, la Estrategia de turismo comunitario sostenible para el Valle de Viñales y otros documentos históricos y de cultura local de la zona declarada.
“Este portal se enriquecerá, en la medida de las posibilidades, con el propósito de que las personas se cultiven en el conocimiento e interpretación de los atributos del valor excepcional del sitio”, afirmó.
ESTRATEGIA ANTE UNA PANDEMIA
Ante la COVID -19 y a tono con las prioridades del país, especialmente con enfoque en la agricultura, un grupo de promotores culturales de la Oficina se ha vinculado a la campaña tabacalera, ya que es el cultivo del tabaco otro de los atributos de la declaratoria.
“Nuestro grupo de promotores de la actividad cultural, como parte del Plan de manejo del sitio, en la parte operativa, no solo ha trabajado en el mantenimiento de los senderos interpretativos existentes – cinco dentro del área-, sino que ha apoyado la cosecha tabacalera en la confección de los pilones de las hojas de tabaco para posteriormente ser vendidas a Tabacuba.
“Hemos trabajado en tres fincas de confianza, que son itinerario obligado por los elementos interpretativos en la preservación de los atributos por los que el sitio fue declarado, dentro de ellas la finca Paraíso, la cual en los años 2009 y 2019 recibió el premio nacional especial de la cátedra de arquitectura vernácula González de Cárdenas, en restauración y conservación, respectivamente”, concluyó Mena.
Es el Valle de Viñales una de las maravillas naturales de las que se enorgullece Pinar del Río. Su inclusión dentro de la lista de sitios emblemáticos del patrimonio mundial es un compromiso que debemos mantener en aras de salvaguardar las tradiciones culturales que nos identifican.