La producción de alimentos continúa siendo una prioridad de trabajo en el accionar diario del Gobierno cubano. Así lo ratificó el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al encabezar, junto al Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, una nueva reunión de chequeo del Programa Alimentario, realizada durante la intensa jornada de este viernes.
De ahí la insistencia del Jefe de Estado en que la agricultura tiene que convertirse en la principal fuente de alimentación de los cubanos, más aún en los complejos tiempos que se avecinan para la economía mundial, sobre la cual también recaen los efectos de la COVID-19.
En la medida en que se potencien nuestras producciones –enfatizó- además de lograr satisfacer las necesidades de la población, también se propicia un desarrollo del sector y un mayor encadenamiento agrícola.
Estrechamente vinculado a esos temas, el mandatario subrayó la importancia de desterrar la mentalidad importadora en nuestras maneras de hacer, porque “no deja pensar y acomoda”. Potencialidades para desarrollar producciones propias tenemos, acotó.
Aun en momentos de complejidad –valoró- el país deberá continuar avanzado sin perder la equidad social. Cómo hacerlo, puntualizó, ha sido claramente definido en la conceptualización del modelo económico y social cubano, así como en los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, aprobados en el Congreso de la organización partidista, en cuya implementación tenemos que seguir avanzando.
Díaz-Canel reflexionó acerca de la importancia que se debe conceder a las acciones que contribuyan al mejoramiento de la tierra, como son el riego y la producción de fertilizantes.
De igual manera, acentuó la necesidad de redimensionar el trabajo en la agroindustria, con el propósito de aprovechar al máximo las diferentes formas de gestión y de propiedad que en ella coexisten.
Especial énfasis hizo también en las inversiones dentro del sector y en las cuales, necesariamente, deben ser tenidas en cuenta las formas no estatales de producción. Señaló, además, la prioridad del perfeccionamiento del sistema de comercialización y acopio; a los estudios que puedan realizar expertos que aporten soluciones; así como a la búsqueda constante de mecanismos que estimulen a los productores.
Entre los principales asuntos evaluados durante el encuentro de trabajo, donde se confirmó la importancia de alcanzar la soberanía alimentaria desde nuestros propios esfuerzos, el ministro de la Agricultura, Gustavo Rodríguez Rollero, se refirió a la preparación de las tierras, como parte de lo cual en la última semana se trabajó en el movimiento de más de 62 mil hectáreas.
La tendencia en los últimos quince días –aseguró- ha sido al incremento sistemático de estas acciones, teniendo como estrategia adelantarse lo más posible a la llegada de las lluvias, momento en el que resulta vital tener listas la mayor cantidad posible de áreas de siembra.
De manera particular comentó los avances en la campaña de primavera del arroz, vital para garantizar los diferentes destinos que tiene este alimento en el país, y las acciones que se han realizado para garantizar áreas adecuadas destinadas a la siembra de pastos, forrajes y plantas proteicas con destino a la alimentación de la ganadería fundamentalmente.
Respecto a la siembra de cultivos varios, Rodríguez Rollero detalló que hasta el cierre del 20 de abril apenas se había logrado cumplir el plan a un 56%, atraso que ha estado ocasionado sobre todo por los efectos de la sequía, pues los campesinos esperan las primeras lluvias de la época de primavera para lograr mejores resultados en el surco.
Como medidas adicionales para reforzar la siembra de diversos alimentos, explicó que en una primera etapa se están construyendo 200 casas de cultivo rústicas en todas las provincias del país, con el propósito de tenerlas en explotación a finales del mes de septiembre y dedicarlas a la producción de posturas y hortalizas. Adicionalmente, dijo, se utilizarán en la siembra de hortalizas de primavera 569 túneles que son de producir posturas de tabaco.
Puntualmente sobre la cosecha y entrega de los principales productos agrícolas, el titular precisó que se ha realizado un trabajo detallado con cada uno de los productores, a partir de lo cual, si bien han sido detectadas algunas insuficiencias, también se ha podido constatar el ingente esfuerzo que se realiza para captar la mayor cantidad de productos.
Asociado a ello, el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, subrayó la prioridad del análisis de las acciones encaminadas a consolidar la comercialización y contratación de producciones.
Tras el propósito de llegarle uno a uno a todos los productores –enfatizó- hay que realizar trabajos más profundos al momento de contratar, de estimar y en todo ello desempeña un papel esencial el control que tengamos de las bases productivas.
Al respecto, el Presidente Díaz-Canel insistió en el fortalecimiento de los mecanismos a través de los cuales se captan los productos agrícolas y su ampliación.
Si seguimos estimulando la producción –señaló- tendremos cada vez más posibilidades de incrementar la variedad de los alimentos y acercarlos a la población.