ETAPA PRECOLOMBINA
Es un hecho comprobado la presencia de aborígenes con un nivel extensivo por toda su geografía en el espacio que ocupó el otrora término municipal de Consolación del Norte, actual municipio de La Palma. El número de sitios aborígenes ubicados asciende hoy a 69, los cuales han sido localizados y estudiados por la Academia de Ciencias y el equipo técnico del museo municipal Armando Abreu Morales.
Dentro de los lugares de mayor relevancia por la gran cantidad y valía de sus piezas se encuentran Miriam, Loma de Caracoles, Landeiro, Palma Rubia e Itabo de Peñalver. Junto a las evidencias materiales han quedado una gran cantidad de topónimos, que hoy nominan diferentes zonas de la localidad entre los que figuran Caiguanabo, Caimito, Sagua, Jagua, Burén y Guacamaya.
ETAPA COLONIAL
El proceso de ocupación del espacio data de la segunda mitad del siglo XVI con las primeras mercedaciones, destacándose las de Río Puercos a Pedro Menéndez de Avilés en 1569 y el Hato de Caiguanabo a Jerónimo Rojas de Avellaneda en 1571 vinculadas a la cría de ganado mayor y menor.
El proceso del surgimiento del poblado de La Palma fluctúa entre los años 1848 y 1852 y el término municipal de Consolación del Norte tiene su origen en 1879 por reunir los requisitos establecidos por el gobierno colonial.
Es un hecho irrefutable que la dinámica tabacalera constituyó, para Consolación del Norte, en el siglo XIX la causa principal de su desarrollo, junto a la ganadería y las riquezas forestales.
LA ESCLAVITUD EN CONSOLACIÓN DEL NORTE
El fenómeno de la esclavitud está asociado a la propia dinámica económica, utilizando esta mano de obra en las diferentes actividades productivas y contribuyendo a su poblamiento y mestizaje, según se puede apreciar en las diferentes fuentes históricas. Por las características físicogeográficas del territorio se han ubicado en la Sierra de la Guacamaya diferentes rancherías de cimarrones cuyas evidencias pueden apreciarse en el museo.
LUCHAS POR LA INDEPENDENCIA
El inicio del proceso nacional liberador el 10 de octubre de 1868 tuvo adeptos en el territorio, por lo que el gobierno colonial sentenció a muchos jóvenes simpatizantes.
El tres de noviembre de 1869 fueron condenados por infidencia a distintas penas de presidio los vecinos de Consolación del Norte don José Acevedo de la Torre, don Teófilo Azcuy y Cruz, don Blas Méndez Rodríguez, don Manuel Palmé y Reyes, don José Bonifacio Azcuy y Miranda, don Joaquín Pérez Guijarro, don Manuel Jesús Azcuy y Miranda y don Joaquín Montesino y Trujillo, muchos de los cuales compartirían prisión con José Martí en La Habana, estableciendo vínculos que perdurarían hasta la guerra necesaria.
GUERRA DEL ‘95
El paso del movimiento invasor maceista el día 12 de enero de 1895 por la mañana llevó a las fuerzas invasoras a acampar en Cejas de Aradores, a unos cuatro kilómetros del pueblo de La Palma, en la finca propiedad de don José Fuentes Conde. Las fuerzas cubanas tenían la intención de atacar el poblado, pero la maniobra de las autoridades utilizando a doña Faustina Fuentes con la proposición de pagar una contribución de guerra y de que los vecinos abandonaran la producción y el comercio tabacalero llevó a Maceo a acceder, continuando el avance invasor.
Durante su campaña en Pinar del Río el lugarteniente general volvería a operar en territorio palmero en la zona de Caiguanabo, Galalón y la acción del asalto al poblado el 29 de marzo de 1896 que tenía el objetivo de castigar y escarmentar a los habitantes de La Palma por el incumplimiento de lo pactado el 12 de enero.
Las fuentes históricas mambisas e investigaciones de especialistas como Enrique Alonso, Rafaela Azcuy y Armando Abreu han permitido reconstruir una de las acciones militares más debatidas por los especialistas, y partiendo de lo que apunta el jefe del estado mayor de Antonio Maceo, José Miró Argenter, en sus Crónicas de la Guerra se estudian las fuerzas de ambos bandos y el sistema defensivo creado por los españoles alrededor de la plaza.
“…El fuego de fusilería cobró… entonces mayor incremento las descargas atronaban el espacio. El incendio del caserío en vez de favorecer perjudicó a los insurrectos, puesto que la claridad de las llamas alumbraban de lleno todo el espacio que ocupaban y eran víctimas de los fusilazos que vomitaban los españoles bien apostados y libres de estorbos… Un soldado de la escolta de Maceo hubo de liarse con una mujer que le hizo tres disparos de revólver, este pasaje se desarrolló en los umbrales de una bodega. Aquella espartana defendía el mostrador”.
Y concluye el general Miró Argenter: “El ataque a La Palma fue para nosotros una derrota completa…”.
El 24 de marzo de 1896 se alza José Antonio Cruz Cruz en armas contra España, con 25 peones de su finca, en Arroyo Rico. A él Antonio Maceo le otorgó los grados de comandante, con lo que resultó el palmero que más alto grado militar alcanzó en las guerras por la independencia.
La reconcentración de Weyler entre 1896 y 1898 impactó en la población del territorio, falleciendo 1 896 personas como consecuencia de esa cruel política.
INTERVENCIÓN ESTADOUNIDENSE
El periodo de ocupación militar estadounidense constituyó después de concluida la guerra una de las más difíciles etapas que vivió la población de Consolación del Norte en más de 50 años.
Desde el punto de vista económico la destrucción del embarcadero de Río Blanco fue un duro golpe, por cuanto significó la paralización de casi toda la entrada y salida de mercancías en el territorio.
Entre 1899 y 1902 se desarrolló en Cuba un proyecto de saneamiento por parte de las autoridades estadounidenses que no llegó a La Palma.
INSTAURACIÓN DE LA REPÚBLICA
Con el establecimiento de la República fue electo como alcalde (1902-1908) y (1908-1912) José Antonio Cruz Cruz, patriota que había jugado un papel muy importante durante la guerra del ‘95.
La producción tabacalera que por muchos años constituyó el principal renglón del municipio no fue más a lo largo de toda su historia que un instrumento para la explotación del campesinado.
La agricultura cañera, favorecida por el auge desmedido del comercio del azúcar entre 1914 y 1918, posibilitó la construcción del central Niágara. En 1917 comenzaron las labores de desmonte y construcciones y en 1921, en plena crisis deflacionaria, hizo su primera zafra cuando el valor del azúcar era insignificante.
OPOSICIÓN A LA DICTADURA DE GERARDO MACHADO. EL INTENTO DE LEVANTAMIENTO DEL OCHO DE AGOSTO DE 1931
Los movimientos políticos y sociales que se dieron en todo el país durante esta etapa tuvieron incidencia también en este municipio. Desde 1927 que Gerardo Machado proclama la prórroga de poderes comienzan las primeras manifestaciones de la oposición con la negativa del alcalde Liberato Domingo Azcuy a permanecer por más tiempo en el cargo.
El ocho de agosto de 1931 se produjo un levantamiento contra el dictador. Sus principales protagonistas fueron hechos prisioneros: José A. Cruz, Liberato Domingo Azcuy, Francisco Trueba, Arsenio Tomás y Gil Pimentel.
La expresión más alta de oposición al machadato la constituyó el maestro de profesión Azcuy, electo alcalde de La Palma en 1926 con gran respaldo popular.
Conocida la antipopular política de Machado, Liberato se opone a la prórroga de poderes decretada por Machado, a pesar de que la medida le permitía seguir por cuatro años más en el cargo de alcalde. En los primeros días de agosto de 1932, Liberato es apresado por orden del “asno con garras” y enviado a la antigua cárcel de La Cabaña, donde conoce a Raúl Roa y con quien mantiene a partir de ese momento una intensa amistad. Posteriormente, en el presidio de Isla de Pinos, conoce a Pablo de la Torriente Brau.
Cuando Liberato cae preso por segunda vez es enviado al Castillo del Príncipe de donde lo sacan la noche del 23 de mayo de 1933. La orden que había dado Machado era terminante: “Lo quiero muerto”. El asesinato se produce en la noche del 24 de mayo cuando una pareja de soldados ejecuta la orden tomando como pretexto un inexistente intento de fuga. A su lado cae el “Gallego” Iglesias.
Pablo de la Torriente Brau manifestó al respecto: “Su asesinato fue uno de los más repugnantes e injustos que cometió el machadato” y Raúl Roa García, el Canciller de la Dignidad, sobre el crimen a este mártir palmero, dijo: “Era un hombre muy valiente y eso hay que destacarlo bien”.
A la caída de la dictadura machadista Helena Azcuy Lemus fue nombrada alcaldesa de Consolación del Norte por Ramón Grau San Martín, a instancias de Antonio Guiteras Holmes, para suceder a Francisco Trueba, lo que constituyó esto uno de los principales logros del ala izquierdista del Gobierno de los Cien Días. Asumió su cargo el dos de noviembre de 1933 hasta noviembre de 1936, siendo la primera mujer alcaldesa en Cuba.
DESARROLLO ECONÓMICO, POLÍTICO Y SOCIAL ENTRE 1940-1948
El dominio de los afiliados al Partido Auténtico en La Palma a partir de 1944 tiene sus antecedentes en el anterior gobierno de Ramón Grau San Martín (1933) que sin imprimir un carácter revolucionario y popular de las medidas de Antonio Guiteras en su gobierno logró escudar su verdadera imagen.
A ello se unieron las simpatías de sus coterráneos y las promesas de obras públicas y fue esto último lo de mayor impacto, pues se construyeron 73, 45 kilómetros desde la carretera de Bahía Honda a San Vicente en el municipio de Viñales, además de escuelitas rurales en los barrios de Las Pozas, Arroyo Naranjo, La Jagua y Vegas Nuevas y un centro de asistencia para la salud. Aunque todo esto no fue la solución a los graves problemas que padecía la población, por primera vez un gobierno de la República se había hecho sentir en La Palma.
SITUACIÓN POLÍTICA EN LOS INICIOS DE LA DÉCADA DE 1950
La situación política a inicios de 1950 estaba en franca contradicción con el régimen y crecían las simpatías por todo partido o movimiento de oposición, incluso, el Partido Ortodoxo, con el descalabro que sufre después del golpe de Estado de 1952, mantiene sus bases de apoyo popular.
La distribución clandestina de La historia me absolverá despertaba el interés de muchos, las luchas obreras en el central Niágara se sucedían, así como las huelgas con marcado matiz revolucionario.
El sector campesino ya se había organizado y se manifestaba contra la detención de sus dirigentes, contra el pago de la renta y el desalojo. En estas circunstancias la respuesta gubernamental fue la amenaza y el plan de machete.
Este panorama, apreciable con evidente claridad, era el resultado de la existente inquietud política de rechazo y descontento a la dictadura en la inmensa mayoría de la población.
REACCIÓN ANTE EL GOLPE DE ESTADO DEL 10 DE MARZO DE 1952
Afiliados al Partido Ortodoxo, 14 días después del golpe de Estado, se reúnen en la casa de Rafael D. Azcuy en La Jagua para trazar la nueva estrategia de lucha en otras circunstancias contra la dictadura. Asistieron por la dirección provincial de la Ortodoxia el doctor Dominador Pérez, Salvador del Río y Agapito Guerra.
ANTECEDENTES DEL FRENTE GUERRILLERO EN LA CORDILLERA DE LOS ÓRGANOS
En marzo de 1957, en la casa de Jesús Trujillo en el barrio La Jagua, se creó el núcleo básico del Movimiento 26 de Julio, bajo la dirección de Arsenio Miranda Martínez, Mario Figueroa Graverán, Flores Cruz Caballero y Ángel Custodio González Rivera.
Arsenio fue coordinador del movimiento hasta su incorporación en 1958 a la lucha armada. A partir de entonces esta responsabilidad recayó en Ángel Custodio González. Una vez creada la primera célula crece aceleradamente el número de integrantes.
El movimiento ya se había organizado y algunas de sus figuras se encontraban clandestinos como Arsenio Miranda y Francisco (Franco) Lemus Cuevas. Tras el intento de crear un núcleo guerrillero con Juan Palacios, y la llegada del comandante Dermidio Escalona Alonso quien se refugió en casa de Justo Expósito en La Jagua, se decide la apertura del frente guerrillero donde participan Francisco Lemus Cuevas, Ramón Martínez, Luis Rosales, Santiago Rodríguez, Nicolás Vélez, Mario Limonta, José Antonio Abreu, Arsenio Miranda, Felipe Rosales, Daniel Rosales, Elisardo Casanova, Manuel Ávila y José Galiano, entre otros.
ACCIONES ARMADAS DEL FRENTE GUERRILLERO
El hostigamiento a cuarteles constituyó el móvil de las acciones armadas del frente guerrillero, así como cortar toda comunicación con la zona de operaciones para evitar refuerzos y sabotajes a sectores económicos.
Para el logro de estos objetivos fue necesario fraccionar el grupo: el primero con Franco Lemus Cuevas al frente se emboscaría en el entronque de Cacarajícara. El segundo, dirigido por el capitán Pepito Algibay, parte con la misión de volar el puente de Las Pozas.
REACCIÓN DE LA DICTADURA ANTE EL AUGE REVOLUCIONARIO
El ocho de diciembre de 1958, en la máquina del aserrío de Flores Cruz Caballero, en Margajitas, se encontraban reunidos Luis González Pardo, Otto Barroso, Paulo Fernández y “Pitute”, con el objetivo de alzarse.
Los militares dan parte al regimiento de Pinar del Río y comienzan las detenciones de los sospechosos y son llevados al cuartel de La Palma donde son asesinados ese día.
Los jóvenes torturados y ejecutados fueron Otto Barroso de la Cruz, Pedro Zamora Hernández, Sergio Dopico Valle, Joaquín Pérez González, Celso Ambrosio Cruz Caballero, Francisco Cruz Caballero, Ángel Cayetano Ramírez Pedroso y Leoncio Sánchez Rosales.
TRIUNFO DE LA REVOLUCIÓN
El dos de enero de 1959 se consolidaba la victoria revolucionaria con la entrada del Ejército Rebelde a La Palma, rindiéndose todas las instituciones políticas y jurídicas del territorio. El ayuntamiento y cuarteles, sin ofrecer la más mínima resistencia, se entregan a las nuevas autoridades.
Se designaron como comisionados municipales a Arsenio Miranda Martínez (Nestor) y Eloy Cruz Caballero. Esta primera forma de gobierno funcionó sin dificultades durante un tiempo, nombrándose como único comisionado en el poder a Justo Expósito, quien se hizo acompañar del tesorero, el contador y el funcionario del anterior régimen, que nada tuvieron que ver con el sucio juego de la política.
AVANCES SOCIO-CULTURALES EN EL MUNICIPIO
Como parte de la política educacional de la Revolución, en el propio año 1959, y por la necesidad de resolver el fenómeno educacional de cientos de niños y jóvenes del sector urbano y suburbano del pueblo de La Palma y La Mulata, respectivamente, fueron habilitados los cuarteles de ambas zonas como escuelas. Se trataba de la apertura de las primeras instalaciones docentes creadas por el Gobierno revolucionario. El cuartel de La Palma fue convertido en centro de enseñanza secundaria.
LA CAMPAÑA DE ALFABETIZACIÓN
La revolución cultural que se operó en todo el país tomó impulso a partir de la Campaña de Alfabetización. Se pretendía con ello enseñar a leer y a escribir a la gran masa de población analfabeta de la Isla.
El municipio de La Palma aportó 222 jóvenes a las brigadas de alfabetizadores y fueron distribuidos a las distintas zonas en dependencia de las necesidades.
Un total de 700 alfabetizadores se volcaron a las zonas asignadas, lo cual trajo como consecuencia que se alfabetizaran 3 500 personas.
La ofensiva imperialista por Playa Girón en abril de 1961 puso de manifiesto la respuesta revolucionaria de los palmeros, que participaron como integrantes del Ejército Rebelde, las Milicias Nacionales Revolucionarias y movilizados del pueblo. La localidad contó con varios combatientes en las acciones, destacándose el mártir Pedro Borrás Astorga.
CRISIS DE OCTUBRE
Durante la crisis de octubre de 1962 la Cueva de Los Portales cobró renombre nacional al establecerse allí el comandante Ernesto Guevara con su comandancia general del ejército de Pinar del Río durante esos días “luminosos y tristes”, como dijera el Che en carta a Fidel.
INAUGURACIÓN DEL PUEBLO DE SAN ANDRÉS DE CAIGUANABO
El 28 de enero de 1967, con la presencia del Comandante en Jefe Fidel Castro, fue inaugurado el pueblo de San Andrés de Caiguanabo. Ese día también se proclama la creación en esa zona del primer plan de desarrollo integral del país.
De los tres planes pilotos que se llevaban a cabo por la Revolución, este siguió tres líneas fundamentales en su desarrollo. En primer lugar, el plan de siembra de café en el área de producción estatal; en segundo, la construcción de círculos infantiles para la población prescolar y de internados para la población escolar, y por último, el plan de desarrollo de los pequeños productores.
Para los pobladores del valle la inauguración de estas obras trajo beneficios sociales para sus habitantes. Ello significaba empleo para miles de estos hombres y mujeres, educación para sus hijos y bienestar en sentido general. Aquel día fueron inauguradas 22 obras sociales.
En su discurso Fidel expresó: “…Triunfar en este valle significa triunfar en todos los campos de la Patria…”.
Lo más significativo que se produce en ese municipio en el año 1967 en el campo de la Educación es la creación de la primera instalación docente moderna con capacidad para 300 alumnos y cinco círculos infantiles con similares características, más la construcción de tres nuevos internados en esa zona montañosa.
En aquella ocasión el Comandante en Jefe expresó: “… Los de San Andrés, ven en esta noche una etapa de vertiginoso desarrollo en esta región, pero nosotros vemos también en esta obra de San Andrés, en este desarrollo de San Andrés, la obra de la Revolución y la idea de lo que había de ser en el futuro nuestra Patria…”.
Los logros de la Salud en La Palma fueron notables desde los primeros años del triunfo de la Revolución. Por ejemplo, zonas como San Andrés, Sanguily y Verracos para 1965 contaban con una posta médica, servicio que no se prestaba anteriormente es esos lugares.
Desde 1961 se comenzaron a palpar los primeros avances a partir de la integración de la casa de socorro al Ministerio de Salud Pública. Con el nombre de Unidad Sanitaria dejaba de ser el viejo establecimiento médico una dependencia de la administración municipal que controlaba el alcalde. Por otra parte, la campaña de vacunación contra la poliomielitis, que por primera vez se desarrollaba en el país, abarcó a toda la población infantil.
En el poblado cabecera del municipio se construyó un policlínico que posibilitó la ampliación de los servicios médicos y una mejor atención, al contar con un personal especializado de forma permanente en la unidad y el acondicionamiento del lugar para ingresos y prestación de servicios que no se brindaban como la realización de partos.
Para 1975 se habían reducido drásticamente enfermedades como el tétanos, la gastroenteritis, la tuberculosis y el parasitismo, y ya se contaba con una población sana y dejaban los niños de ser la parte de la población que más moría.
El desarrollo de la infraestructura de la Salud continuó con la instauración del programa del médico de la familia, para lo que se construyeron 13 consultorios.
Además, el sector mostró avances significativos al ampliarse las capacidades del policlínico cabecera y acondicionarse una clínica estomatológica y un hogar materno. Se crearon también una unidad de fisioterapia, una óptica y una nueva farmacia.
Con la aplicación en 1976 de la nueva división político-administrativa, los territorios de La Palma y San Andrés se unificaron en uno solo, para formar el municipio de La Palma que sería atendido directamente por la provincia. En la anterior estructura Bahía Honda atendía a La Palma, quien a su vez se subordinaba a él. De modo igual sucedía a San Andrés en relación con Consolación del Sur.
Como parte del trabajo previo a las elecciones para la creación de los órganos del Poder Popular, La Palma fue dividido en 63 circunscripciones, con 75 colegios electorales que sumaron un total de 16 696 electores. De estos votaron 16 530 electores para el 99 por ciento del total de votantes.
Después del triunfo de la Revolución se amplió la infraestructura azucarera y tanto la industria como el sector agrícola fueron modernizados paulatinamente.
La producción tabacalera alcanzó avances significativos en relación con años anteriores y el área dedicada a este cultivo ha llegado hasta las 147 caballerías.
El programa de reforestación comenzó en el propio año 1959, pues la tala indiscriminada de que fueron objeto los bosques del montañoso territorio obligó a ingentes esfuerzos en tal sentido. Hacia la década de 1970 se habían planteado ya cuatro millones de árboles.
Con la creación de la ANAP se mejoró el nivel de vida del campesino y se efectuaron mayores entregas de producción al pueblo.
Durante este periodo los avances conquistados en la Educación pudieran resumirse a partir del desarrollo de la infraestructura del sector y por la universalización de la educación en el municipio.
La electrificación, a pesar de presentar un saldo favorable, no creció a un mayor ritmo como en otros municipios de la provincia.
BATALLA DE IDEAS
Esta surge a partir de la lucha convocada por la Revolución para el regreso del niño Elián González (noviembre de 1999) con su padre. Un aspecto central de esta campaña fue el esfuerzo por ampliar las oportunidades educacionales para el pueblo y aumentar el acceso a la cultura y la localidad también fue favorecida por estas reformas.
El 14 de junio de 2001 Fidel Castro presidió el acto de culminación del proceso de electrificación de las escuelas rurales donde se colocaron celdas fotovoltaicas y una nueva tecnología en la escuela Lázaro Acosta Paulín, en el consejo popular de Jagua Vieja.
En el 2008 dos huracanes de gran intensidad, Gustav e Ike, azotaron el territorio y los daños fueron cuantiosos en la infraestructura constructiva y en la agricultura. Afortunadamente no hubo que lamentar pérdida de vidas, pero el estrago causado se hizo notar.
El General de Ejército Raúl Castro se personó en la localidad interesado en cómo resarcir los perjuicios causados por estos fenómenos meteorológicos y aseguró que nadie quedaría desamparado.
El presidente de Venezuela Hugo Rafael Chávez Frías, de paso por el territorio, visitó la comunidad de Caiguanabo, asentamiento seriamente perjudicado por los huracanes, y prometió a sus pobladores la construcción de un moderno poblado, el cual se materializó unos años después.