La XXIX edición de la Brigada de Trabajo Voluntario “Ernesto Ché Guevara” de Canadá, compuesta por 31 integrantes, fue recibida en el parque Martí por las autoridades de la provincia Pinar del Río, cumpliendo un programa de trabajo después de asistir al “Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba”, convocado por la CTC y el ICAP en el contexto de la celebración de 1 de Mayo.
Esta brigada se fundó en 1992 y constituyó la antesala para que en 2002 se fundara la actual “Red Canadiense de Solidaridad con Cuba” (CNC, por sus siglas en inglés). Desde entonces, este proyecto ha visitado nuestro país en 29 ocasiones, teniendo como esencia de su trabajo de solidaridad con Cuba el apoyo a la Revolución, y la denuncia y enfrentamiento al Bloqueo de EEUU.
Muchos de sus integrantes fueron muy activos durante la Campaña Internacional por la Liberación de los Cinco; realizando manifestaciones ininterrumpidas durante 110 meses frente a las representaciones diplomáticas de EEUU en su país.
Han continuado esa valiosa labor, aun en tiempos de pandemia, con eventos virtuales contra el bloqueo los días 17 de cada mes, sumando incluso a amigos de Cuba de otras latitudes; a la par de otras iniciativas que incluyen también la demanda de excluir a Cuba de la “Lista de Países Patrocinadores del Terrorismo”, o la participación el último fin de semana de cada mes en las Caravanas de Autos y Bicicletas contra el Bloqueo; así como, en cada una de sus visitas, la realización de donaciones de insumos a instituciones de nuestro país, fundamentalmente del sector de la salud.
Estarán en Vueltabajo hasta el 8 de mayo y desfilarán junto a su pueblo el próximo día 5, celebrando el día de los trabajadores.
Mensaje de Rylee MacKenzie
Soy la coordinadora adjunta de la 29ª Brigada de Trabajo Voluntario Che Guevara, un proyecto conjunto de la Red Canadiense sobre Cuba y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP).
En nombre de la Brigada de Trabajo Voluntario Che Guevara, quiero expresar mi más sincero agradecimiento por acogernos en Pinar del Río. Es un honor estar aquí, en su hermoso país.
También es un honor para nuestra brigada llevar el apreciado nombre del Comandante Ernesto Che Guevara, héroe de la Revolución y faro de esperanza para todos los que estamos hoy aquí. El Che fue un observador: un joven que abandonó su hogar en busca de una gran aventura, y se encontró descubriendo el complejo mundo de Sudamérica. El Che fue testigo de las luchas de los trabajadores que se enfrentaban a una pobreza y una explotación extremas. Su mundo se abrió ante sus ojos cuando conoció la lucha de los pueblos indígenas, que sufrían inmensamente a causa del colonialismo y el imperialismo. Durante este viaje formativo, su espíritu revolucionario creció hasta convertirse en una fuerza poderosa, aunque nunca perdió su ternura. Este equilibrio de fuerza y compasión podría describirse mejor con sus propias palabras: «Sabía que cuando el gran espíritu guía dividiera a la humanidad en dos mitades antagónicas, yo estaría con el pueblo».
Para los brigadistas, su primera vez en Cuba es muy parecida al viaje del Che: un inesperado mosaico de emociones y experiencias que hacen que nos transformemos como personas al regresar a suelo canadiense. El año pasado tuve la suerte de visitar Cuba por primera vez. Aprendí más sobre la vida de lo que jamás hubiera pensado. Aprendí sobre las complejidades y contradicciones del mundo en que vivimos. Descubrí una nueva perspectiva de la experiencia humana. Me renové con la poderosa fuerza del espíritu revolucionario del pueblo. Me convertí en mejor persona gracias a Cuba. Espero que todos los brigadistas que están hoy aquí sientan todo el espectro de emociones. Recuerdo la rabia muy vívidamente. Vi lo que un gobierno movido por la humanidad y no por la codicia podía hacer por su propio pueblo. Me enfureció que nuestro gobierno se negara a hacer lo mismo. Me enfureció que nuestro Primer Ministro y todos los que vinieron antes que él simplemente estén de acuerdo con hacer daño a nuestros cuerpos y espíritus. Estaba enfadada, pero sigo transformando esa rabia en esperanza y solidaridad.
La Brigada de Trabajo Voluntario Che Guevara ha demostrado su solidaridad con el pueblo cubano durante tres décadas. Durante tres décadas los brigadistas han sido testigos de los desafíos resultantes del criminal bloqueo impuesto por los Estados Unidos, pero también han sido testigos de la fuerza, la resistencia y la creatividad del pueblo cubano para superar esos desafíos. A pesar de los intentos de Estados Unidos de asfixiar a Cuba mediante el bloqueo, no ha podido sofocar la belleza y la humanidad del pueblo cubano.
Viniendo de Canadá, donde la educación cuesta una fortuna, la sanidad está infrafinanciada y atacada, la pobreza y la falta de vivienda van en aumento, una crisis de drogas fabricada mata a nuestra gente y las grandes corporaciones se hacen cada vez más ricas a costa de los trabajadores, la sociedad cubana nos inspira. Cuba nos da esperanza en la posibilidad de un futuro que anteponga las personas a los beneficios.
Espero que compartan lo que han visto aquí con amigos, familiares y desconocidos en su país. Este es nuestro papel como observadores de la revolución cubana. El mundo necesita conocer la fuerza y la humanidad de Cuba. El mundo necesita saber que Cuba no puede ser quebrada, y que la revolución no puede ser detenida. Socialismo o Muerte. Viva Cuba.