El gobierno británico, criticado por limitar las pruebas de la Covid-19 a los pacientes hospitalizados, amplió hoy los test a los trabajadores esenciales, pero la demanda superó en pocas horas la capacidad de turnos disponibles.
El ministro de Salud, Matt Hancock, anunció la víspera que la expansión de los exámenes diagnóstico formaba parte de la estrategia gubernamental para ‘volver a poner al Reino Unido de pie’, una vez se supere la pandemia que deja ya casi 19 mil muertos y unos 139 mil contagios en el país.
El objetivo, dijo, es determinar si los empleados de sectores claves de la economía que se encuentran actualmente aislados por presentar ellos, o algunos de sus familiares, síntomas de la Covid-19, contrajeron en realidad el nuevo coronavirus, para que puedan reincorporarse a sus puestos de trabajo.
La oferta incluye a los trabajadores sanitarios, policías, choferes del transporte público, empleados de supermercados y de empresas productoras de alimentos, periodistas y maestros, entre otros, hasta totalizar alrededor de 10 millones de personas, de acuerdo con los cálculos oficiales.
Según se explicó, los interesados solo tienen que registrar sus datos en una página web y recibirán un mensaje de texto o correo electrónico para reservar un turno en uno de los centros de pruebas habilitados con ese propósito, o pedir un kit a domicilio, aunque esta última opción está bastante limitada.
Este viernes, sin embargo, el sitio electrónico cerró a las pocas horas de comenzar a recoger las solicitudes, y el Departamento de Salud y Atención Social emitió un mensaje en el que aseguró que la demanda había sido muy alta, y se disculpó por el inconveniente.
Seguiremos aumentando la capacidad. Mañana habrá más pruebas disponibles, aseguró la entidad adscrita al ministerio británico de Salud.
El gobierno prometió realizar 100 mil test diarios para fines de abril, pero a falta de una semana para que termine el mes, nunca ha llegado a completar un cuarto de esa cifra en un día, a pesar de que según dijo Hancock la víspera, existe capacidad para hacer 51 mil exámenes en una jornada.
Los reclamos a la gestión gubernamental también están relacionados con la escasez de equipos de protección para el personal médico, la no inclusión en las cifras oficiales de las muertes causadas por la Covid-19 en los asilos de ancianos y domicilios particulares.
Además, se argumenta que el Ejecutivo perdió cinco semanas entre finales de enero y febrero para prepararse contra la pandemia.