Las Fuerzas Armadas rusas declararon hoy el cese al fuego y la apertura de corredores humanitarios desde Kiev, Járkov, Sumy y Mariúpol, debido al deterioro de la situación en esas ciudades ucranianas.
Según comunicado del Cuartel General de Coordinación Interministerial para la Respuesta Humanitaria en Ucrania, la decisión entró en vigor a partir de las 10:00, hora local, y fue el resultado de una solicitud del presidente francés, Emmanuel Macron, a su homólogo ruso, Vladimir Putin.
El corredor de Kiev pasará por varias localidades en dirección a la ciudad belarusa de Gómel, mientras desde Mariúpol se establecerán dos rutas de salida con destino a la ciudad rusa de Rostov del Don y a la ucraniana de Zaporozhie.
En el caso de Járkov, los civiles podrán viajar a la ciudad rusa de Bélgorod, y desde Sumy lo harán también a Bélgorod y a la localidad ucraniana de Poltava.
La parte rusa notificó a Naciones Unidas, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa y el Comité Internacional de la Cruz Roja sobre la apertura de estos corredores humanitarios en Ucrania.
El comunicado señaló que la evacuación se garantizará con la ayuda de drones rusos, con el objetivo de que la operación pueda ser comprobada y registrada.
«Advertimos que todos los intentos de la parte ucraniana de engañar una vez más a Rusia y a todo el mundo civilizado al interrumpir la operación humanitaria supuestamente por culpa de la Federación de Rusia serán inútiles y no tendrán sentido en esta ocasión”, explicó el organismo de Moscú que coordina la respuesta humanitaria en Ucrania.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk solicitaran ayuda para repeler la agresión de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
Putin, en un discurso televisado para informar sobre el inicio de la operación, afirmó que el objetivo es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio por parte de Kiev durante los últimos ocho años y desmilitarizar Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques están dirigidos a infraestructuras castrenses, instalaciones de defensa aérea, aeródromos y la aviación militares y subrayó que la población civil de Ucrania no está amenazada.