La selección nacional de Nicaragua y los Leñadores de Las Tunas en representación de Cuba chocarán hoy por el boleto finalista de la primera edición de la Serie de las Américas de béisbol.
Los pinoleros se han mostrado como un equipo superior en todos los órdenes, y apoyados por la gran fanaticada que asistirá a su Estado Roberto Clemente de la ciudad de Masaya, tratarán de imponer su favoritismo ante unos rivales, que llegaron a esa instancia por los beneficios del sistema de competencia.
Apenas una derrota, ante las invictas Cabras de Curazao, sufrió la tropa de Sandor Guido en la etapa clasificatoria y dejó muy buenos guarismos sobre el terreno en los tres departamentos fundamentales de juego, al promediar a la ofensiva para .335, aceptar solo 2.51 carreras limpias cada nueve entradas y cometer solo tres errores al campo.
La víspera demostraron una vez más su hambre de triunfos al batir 7-2 a los colombianos Caimanes de Barranquilla en un juego de puro trámite para ellos, que les abrió las puertas de la semifinal al conjunto de Cuba.
Los Leñadores, doble campeones nacionales de su campeonato doméstico, son la otra cara de la moneda, y aunque se mantienen con vida en el torneo regional al terminar con dos triunfos y tres reveses, lo cierto es que no han dejado una buena imagen en sus presentaciones.
Una ofensiva con deudas, no obstante concluir la primera fase con promedio de .289 gracias a la paliza que le dieron a los débiles argentinos, ocho pifias para un bajo average defensivo de .952 y un cuerpo de lanzadores que aceptó 8.77 anotaciones limpias por partido, son números incompatibles con un equipo como este, reforzado además con figuras de la selección nacional.
Haber recibido dos fuera de combate consecutivos, algo que jamás le había ocurrido a ninguna escuadra representativa de Cuba en un torneo internacional, lo dice todo, y aunque Prensa Latina ha podido comprobar el buen ánimo que existe dentro de la tropa verdirroja para este encuentro, el optimismo de sus fanáticos se mantienen la altura de los tobillos.
Para este partido, programado para las 18:00, hora local, la dirección de los nicaragüenses anunció otra vez para escalar el montículo al estadounidense Cole Coke, el mismo que venció a los cubanos el día inaugural.
El serpentinero zurdo, trabajó en aquella ocasión cinco episodios completos, espació seis indiscutibles, ponchó a un rival, boleó a otro y solo permitió una carrera.
Por los Leñadores, el timonel Abeicy Pantoja designó al diestro Raymond Figueredo, un lanzador que no se hizo justicia en su primera salida ante las Águilas Metropolitanas de Panamá.
En esa oportunidad, el natural de La Habana saltó de la lomita en el tercer capítulo, después de tolerar seis indiscutibles y tres anotaciones, una de ellas sucia.