La sala de inducción de parto es una de las obras que se concluyeron recientemente como parte del programa inversionista del hospital provincial Abel Santamaría Cuadrado y para beneficio de la Atención Materno Infantil (PAMI) en el territorio.
Pablo Díaz Fernández, jefe de Inversiones en el «Abel Santamaría», aseguró que las acciones que allí se acometen tienen el propósito de mejorar las condiciones y la atención a las gestantes y los neonatos: “El servicio de inducción sirve para la atención a las gestantes que durante su proceso de trabajo de parto requieren de un tratamiento específico”.
Agregó que las labores constructivas, ejecutadas por trabajadores por cuenta propia y asociados al Fondo Cubano de Bienes Culturales, se extienden al cuerpo de guardia y al laboratorio de urgencias del bloque materno, lo cual significa una comodidad para las pacientes que no tendrían que trasladarse a otro lugar para recibir estos servicios.
En el mes de febrero inició también el trabajo en la sala de Neonatología, cuya inversión asciende a un monto superior a los 1,7 millones de pesos. Significó Díaz Fernández que su conclusión contribuirá ostensiblemente a los resultados del PAMI, a partir de las condiciones que reunirá para atender a los neonatos.
A cargo de brigadas del Micons, en la obra se avanza y se trabaja, sobre todo, al detalle, en correspondencia con el llamado que hiciera José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud, en su última visita a esta institución de Salud.
El jefe de Inversiones recalcó que se dispone de un grupo de recursos, en tanto la carpintería está en proceso de fabricación. Dijo que se trabaja en el enchape, en el levantamiento de muros y paredes con repello y en los problemas eléctricos. “En un futuro nos enfocaríamos en lo que llamamos gases medicinales, el falso techo, la hidráulica y la instalación sanitaria, que desde ya se tienen en cuenta”.