Hay paisajes que a veces se esconden a simple vista, y en la simplicidad que suponen descubres la magia que llevan consigo. En el consejo popular Sumidero la naturaleza parece que toca con pinceles el entorno.
Así se conjuga la vida diaria del guajiro que aprovecha la mañana para la faena. Así se entrelazan los colores de la tierra con el verde, que después de la tormenta, renace..Así se vuelven cómplices las nubes y el azul del cielo, para dar al lente la exclusividad que busca.
Al norte de Pinar del Río se esconden, a simple vista, paisajes que hacen enmudecer, paisajes que te invitan solamente, a contemplar la maravilla que son.
Solo quien es capaz de contemplar y amar la naturaleza hace publicos trabajos tan sencillos que llaman la atencion. Agradecido. Un valor inigualable a apreciacion de esos hombres que vinculados a las tradicionales labores de campo las mantienen.