Mover cerca de 3 000 toneladas de tabaco hacia otras provincias se dice fácil. Presenciar la faena es de por sí agotador. El ir y venir de los camiones contrasta con el bullicio de los estibadores para llenar las “jaulas” que parten con destino al centro del país.
Ese es el escenario que por estos días caracteriza al paradero de San Juan y Martínez, donde se cargan trenes con hojas de vegas de primera para que sean beneficiadas lo antes posible.
PROTEGER LA HOJA A TODA COSTA
A la llegada de Ian a Pinar del Río, permanecían en los depósitos más de 33 000 toneladas de tabaco de las dos últimas campañas, de ellas 14 000 se afectaron de alguna manera, debido a los estragos en las distintas instalaciones.
De acuerdo con Emilio Triana Ordaz, director general de la Empresa de Transporte Agropecuario, perteneciente al Grupo Empresarial Tabacuba, aunque la prioridad es techar todas las instalaciones que se puedan para almacenar el tabaco en la provincia, es imperante resguardar 6 000 toneladas, por lo que no descartan el cargue de trenes para su beneficio en otros lugares.
“A veces lo hacemos por carretera, con camiones y rastras, pero con bastante frecuencia coordinamos la transportación por trenes hacia diferentes empresas del país, lo que permite un mayor ahorro de combustible y más eficiencia en la tarea.
“Con el paso del huracán, la mayoría de nuestros almacenes, depósitos y escogidas sufrieron daños. El tabaco quedó bajo encerado o polietileno, no bajo techo, entonces la misión es mover una cantidad considerable dentro y fuera de la provincia”, destacó.
En 18 casillas, las seis UEB productivas del municipio cargaban los bultos. El procedimiento se hacía de manera consecutiva, en seis posiciones, para en dos días a más tardar llenar el tren con una capacidad de alrededor de 300 toneladas.
“Hemos ajustado con el Ministerio de Transporte y Ferrocarriles la posibilidad de llenar un tren en la provincia cada cuatro días. El operativo está pensado para que se roten tres: uno llenándose, uno en el transcurso y otro descargando. Ese es el objetivo para poder sacar y proteger la mayor cantidad posible”, añadió Triana Ordaz.
Trabajadores de la Comercializadora de tabaco en rama, quienes tienen mayor experiencia en la transportación de la hoja, guiaban a varias decenas de hombres de la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco Hermanos Saíz, en lo que era su primera vez en una tarea de esta envergadura.
Al respecto, Vladimir Ríos Pérez, director de Acopio y Beneficio de la entidad, explicó que poseen alrededor de 4 800 toneladas (t) sin beneficiar y necesitan nueve trenes para transportar alrededor de 3 000 hacia Sancti Spíritus, Matanzas, Villa Clara y Cienfuegos.
“Aquí nos vamos a quedar con cerca de 1 600 para cumplir el plan de 2023. En el caso del tapado, que es el que garantiza la capa para el torcido, tenemos acopiadas 241 t, y de ellas 120 beneficiadas, las otras ya estaban en manos de la empresa, algunas en proceso y unas 70 sin beneficiar que no sufrieron daños”, acotó.
SIN RENUNCIAR A LA CAPA DE EXPORTACIÓN
A pesar de que en San Juan y Martínez es necesario construir 1 384 casas de cura para garantizar el éxito de la campaña, la “Hermanos Saíz” no renuncia a producir la famosa capa para la exportación y en eso trabajan sin cesar.
“En estos momentos la Empresa intenta cumplir el cronograma reajustado, sobre todo en la preparación de tierras y la riega de semilleros, que marchan de manera favorable. No obstante, el mayor esfuerzo nuestro y de los productores es tener capacidad de curación”, precisó Luis Enrique Valdés González, director de la entidad.
Agregó que se van a sembrar en el territorio 220 hectáreas de tabaco tapado y 1 110 de vegas finas, estas últimas las que dan la tripa y el capote de los Habanos.
“Ahora lo que más necesitamos es completar las brigadas para construir los aposentos. Faltan 379 brigadas por crear, solo hemos formado 82 y hacia esa dirección dirigimos el esfuerzo.
“El Grupo ha ratificado que la campaña tiene garantía de fertilizantes, fungicidas e insecticidas. Además, reajustamos los planes para que en cada cooperativa se pueda financiar la campaña a los productores y el Banco y la Empresa de Seguros están de cara a la tarea”, puntualizó Valdés González.
Indicó que la decisión fue correr la campaña un mes más, hasta el 30 de enero, pero hacen lo posible para que el tapado se siembre en el menor tiempo posible.
“Hemos obtenido 23 t de capa, y perdimos 8.5. Ya tenemos 13 vendidas, nos queda un volumen en proceso que saldrá cuando terminemos con el tren, a través del cual ya hemos transportado más de 446 toneladas.
“El daño en el tapado ha ido disminuyendo considerablemente, no así en las vegas finas que suman 775 t perdidas y debe seguir creciendo el número de afectadas y perdidas.
Sin embargo, ya el seguro ha cubierto 80 millones de pesos y debe cubrir 60 o 70 millones más. Como es lógico, eso nos va a servir para honrar el préstamo bancario y con las 1 600 toneladas con que nos quedemos, podremos cubrir esas obligaciones, que serían unos 700 millones de pesos.
RECUPERAR LA INFRAESTRUCTURA
Algunos productores de tabaco tapado ya han comenzado a levantar sus casas de cura. La tarea es ardua, pues además de la fuerza de trabajo, el esfuerzo de los forestales es fundamental para garantizar los horcones y horconcillos que llevan las estructuras.
Maribel Rivero Barrios perdió las dos casas de tabaco que destinaba a la cura y al almacenamiento de su cosecha. Ya en sus predios se levantan los nuevos aposentos gracias a una brigada de cuatro hombres, que desde Alquízar vinieron a apoyar.
Los guía Noel, un lugareño a quien todos conocen como El Cangrejo y que ha pasado buena parte de sus casi 70 años construyendo casas de tabaco.
José Tamayo Alarcón cuenta que nunca antes habían, ni siquiera, entrado a una, pues su misión en Mayabeque es sembrar papa, maíz y boniato.
“Somos socios de la CPA Amistad Cuba-México. Cuando pasó el ciclón nos dijeron que nos preparáramos para venir a ayudar a los campesinos a levantar sus casas de tabaco, y aquí estamos, hasta que nos necesiten”.
Por otra parte, Maribel, quien también perdió el techo de su vivienda, asegura que los muchachos “se pegan duro”, y que con el apoyo de la cooperativa los atiende bien, como de verdad lo merecen.
“Tenemos que levantarnos de nuevo. Ya tengo la tierra preparada para sembrar mis 36 000 posturas. Sé que con la ayuda de estos muchachos y el apoyo de mi familia, podremos hacer una buena campaña”, afirma Maribel.
Apuntó Valdés González que en San Juan deben quedar 930 ha sin sembrarse de tabaco. Esas se van a rotar con cultivos para el consumo social y a la sustitución de importaciones. Entre los alimentos a cosechar están el frijol, boniato, maíz tierno, sobre todo, aquellos de rápido consumo y priorizan las hortalizas de ciclo corto.
“Van a construir aposentos aquellos productores con más posibilidades, a diferencia del 2002, que hubo una avanzada mayor de constructores. Ahora el esfuerzo es superior, incluso de los propios campesinos. No obstante, en el tabaco tapado sí sembrarán el ciento por ciento. No renunciamos a ese plan”.
Así trabajan los sanjuaneros dedicados al cultivo de la hoja, luego de que el huracán se ensañara con el fruto de su sacrificio, el mismo que hoy se multiplica para que siga siendo esta, la Meca del Tabaco.