La quinta edición de Ink Factory, convención de tatuadores que auspicia la Asociación Hermanos Saíz en Pinar del Río, reunió a varios artistas de diferentes provincias para mostrar su arte.
También fue un espacio para las artes visuales, la trova, el rap y el rock and roll. La exposición Sol-préndeme de Orlando Barrera Mireles, las peñas Piel Curtida y Micrófono Abierto fueron espacios destinados para el disfrute de las creaciones de los jóvenes artistas de Vueltabajo.
Por su parte, la banda de rock Albatross de Sandino, única representante del género en la provincia, se encargó de cerrar el evento en la casa de promociones musicales La Sitiera.