Este jueves continuaron en Los Ángeles los paneles de debate de la Cumbre de los Pueblos y por la Democracia, de forma paralela a la excluyente IX Cumbre de las Américas.
Aunque intentaron que los verdaderos representantes de la sociedad civil cubana no participaran, la voz del archipiélago se hizo escuchar de forma virtual, y la denuncia a los efectos del criminal bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por EE. UU., en el desarrollo social de la Mayor de las Antillas estuvo presente en sus intervenciones.
La miembro del secretariado de la Federación de Mujeres Cubanas, Gretel Marante Roset, expuso que existe la voluntad política para eliminar las brechas de género que aún persisten, pero el mayor obstáculo para el desarrollo de los proyectos de vida lo constituye el bloqueo, el cual calificó como la principal violencia ejercida hacia las féminas.
Para el doctor en Ciencias Fernando R. Funes Monzote, defensor de la agroecología, el bloqueo impide el desarrollo de una ecología sustentable en equilibrio con la naturaleza, lo que lleva al cubano a una cultura de la resistencia.
Ello se traduce en poner al servicio de la sociedad un ambiente sano y de entender los nuevos desafíos. «Hoy se nos presenta una economía desbalanceada, un ambiente desequilibrado, el cual debemos transformar y tenemos que aprender a adaptarnos y a crear sistemas alimentarios resilientes y sustentables», afirmó.
El director del dúo Buena Fé, Israel Rojas, llamó a las resistencias culturales a entablar una unidad para que el arte nunca sea considerado cosa menor: «O nos armamos nosotros y nos articulamos o seguiremos respondiendo siempre al que paga, el que manda», enfatizó.
Dijo creer en la fuerza de la creación artística, su vitalidad y su desempeño en fortalecer los valores culturales autóctonos, reflejo de los pueblos y de las comunidades con una base alternativa a las corrientes hegemónicas que comercializan las formas artísticas.
Daniel Abner Rodríguez, emprendedor joven y trabajador no estatal, titular de la marca de pinturas Prodanco, hizo referencia a cómo inciden las sanciones hostiles y el robo de recursos en la economía local.
Se declaró ser víctima del bloqueo y dijo: «Presidente Biden: Yo soy un cubano, de los de pura cepa, de esos de los que su administración y Gobierno dicen proteger, por los cuales quieren pelear. Ustedes dicen que el bloqueo no es contra el pueblo cubano, sino contra el Estado, pero el Estado y el pueblo de Cuba son una misma cosa». Añadió que esas medidas atacan a nuestras familias.
En la primera jornada del evento, la periodista Cristina Escobar refirió las constantes agresiones de Washington contra la Isla y aseguró: «mi vida ha estado marcada por la austeridad y resiliencia como la mayoría de los cubanos, debido a los muchos obstáculos que las sanciones de EE. UU. han impuesto», luego puso ejemplos de cómo el bloqueo incide en la calidad de vida de los cubanos.
«Dicen que el propósito (del bloqueo) es el de convertir a este país en una democracia, pero en este contexto eso significa subordinación a los intereses de Washington. Creo en la libertad, en la democracia, la de verdad, y en la mejoría de muchas cosas en mi propio país», afirmó la periodista.
De cómo Cuba combatió la pandemia causada por el coronavirus expuso la científica Tania Crombet, investigadora del Centro de Inmunología Molecular (CIM). «Cuba sabía que no podría contar con los medicamentos estadounidenses, ni con las vacunas de ese o de cualquier otro país del mundo debido al bloqueo y a la desigualdad entre las naciones ricas y pobres en la distribución de las vacunas. Por eso, decidimos desarrollar nuestros propios inmunizantes y, en lugar de uno, creamos cinco candidatos vacunales», afirmó.
La investigadora resaltó que Cuba logró inmunizar al 90 % de su población, y fue la primera nación del mundo en vacunar a los niños. Explicó que lograron, también, más de 25 medicamentos propios contra la patología. «Avanzamos en nuestras áreas de mayor experiencia, que incluyen el tratamiento del Alzheimer y el cáncer», agregó.
Otra voz por Cuba se alzó con la coordinadora del Centro Martin Luther King, pastora Izett Samá, quien agradeció la ayuda internacional con Cuba en el enfrentamiento al bloqueo estadounidense. «La solidaridad demostró que la articulación de nuestros pueblos puede crear espacios para derrotar lo que intenta dominarnos», añadió.
Este viernes está programado el cierre de las actividades con una plenaria, y luego se realizará una movilización por las calles de Los Ángeles, con la participación de más de 200 organizaciones sociales.