En una serie para el olvido, los vegueros de Pinar del Río (20-18) cayeron en cinco ocasiones ante los cocodrilos de Matanzas. Una vez más mostraron sobre la grama del estadio Victoria de Girón las falencias de siempre: mala defensa, bateo con corredores en posición anotadora nulo, y un pitcheo de relevo que no logró detener el empuje de los yumurinos, que amanecen encaramados en la cima de la tabla de posiciones.
Ahora los nuestros inician desde hoy una subserie también difícil ante el equipo de la Isla de la Juventud (22-17), que llega inspirado y con ansias de victoria. Para este viernes está anunciada la presencia, desde el box, del derecho pinareño Erlys Casanova, una carta segura que, en cuatro salidas, ha tirado el juego completo y archiva balance positivo de 3-1.
