“Nos gustaría que los viñaleros de hoy, los de mañana, los de todas las generaciones sientan que el primero de diciembre hay que celebrarlo”, declaró a Guerrillero Carmen Romero, jefa del departamento de comunicación, relaciones internacionales y proyectos de colaboración de la Oficina del Conservador del Valle de Viñales (OCVV).
En medio de las actividades efectuadas recientemente en la jornada Viñales Valle Vivo, la funcionaria recordó que el primero de diciembre de 1999, la UNESCO otorgó al sitio la condición de Patrimonio Mundial, en la categoría de Paisaje Cultural, lo cual “no es solo un orgullo sino también, un recurso económico fundamental para el progreso y bienestar de la comunidad viñalera.
“Somos un pueblo relativamente joven, que no tenemos una fecha fundacional relevante, pero sí es importante que nos anclemos a un día para celebrar aquellas cosas de las cuales estamos orgullosos”, agregó.
Ecos del festejo
Viñales Valle Vivo es una iniciativa de la oficina del conservador del lugar, que este año llegó a su tercera edición. Propuestas culturales y académicas formaron parte del programa diseñado, en ocasión del aniversario 24 de la declaratoria de la UNESCO.
“Todas las actividades concebidas responden a lo que se denomina el valor excepcional universal de Viñales, esos atributos que hace 24 años un comité de expertos decidió que hacen de este un lugar relevante y singular, no solo para Cuba sino también para el mundo”, explicó Romero.
Significó además que el nombre del festejo alude al hecho de que Viñales constituye un escenario natural de valores extraordinarios, que está siendo constantemente transformado por la actividad del hombre, lo que en argot técnico llaman un “paisaje cultural evolutivo continuo”.
El coloquio Viñales en la historia y la inauguración de la muestra colectiva Paisajismo, la llave de Vueltabajo iniciaron el programa esta vez. Asimismo, tuvo lugar una competencia de torcedores de tabaco y una expo-venta de artesanía tradicional proveniente de varias ciudades patrimoniales del país.
En el apartado teórico destacaron los talleres “La autenticidad en los paisajes culturales evolutivos continuos” y “Emprender hoy”. El primero contó con la participación de arquitectos y conservadores involucrados en la preservación del patrimonio en distintas urbes cubanas, los cuales compartieron sus experiencias al respecto.
Al decir de Antonio Luis Mena Quiñones, subdirector del plan maestro de la OCVV, resultó muy provechoso conocer del quehacer generado en otros lugares y a la vez, presentar algunos resultados de trabajo en Viñales. En ese sentido, adelantó que el equipo de la oficina trabaja en varios proyectos; entre ellos, la caracterización geográfica de Viñales, planes de manejo de los accesos al poblado (dígase viales, caminos y bordes), así como el rescate de los materiales de construcción emblemáticos del lugar, como el guano y la teja criolla.
Con sede en el Jardín del Arte Sano, el taller “Emprender hoy” constituyó una acción de capacitación dirigida a una parte representativa de la comunidad de emprendedores viñaleros.
Como parte de la cita, la doctora Iliana Díaz, profesora del Centro de Estudios de la Economía Cubana y el máster Carlos Arce, profesor de marketing y emprendimiento, generaron un dinámico intercambio en torno a los desafíos y oportunidades de las mipymes, además del marketing para emprendedores.
“Los negocios viñaleros tienen el reto de mantener la identidad, ese símbolo que representa el sitio a nivel internacional y que no es solamente el lugar, sino también su gente, no podemos pecar de que el turismo nos lleve a mercantilizar nuestra identidad”, señaló Carlos Arce.
Los desafíos que siguen
La jornada de celebraciones Viñales Valle Vivo aún constituye una propuesta en ciernes, pero con un propósito bien definido: identificar al pueblo que allí habita con los valores excepcionales de su paisaje y el compromiso que entraña defenderlos.
En representación de la OCVV, Carmen Romero explicó que aún es reciente la creación de la oficina. “Todavía muchos nos conocen como el equipo de patrimonio, pero nos hemos propuesto llegar al viñalero y sobre todo, no convertirnos en una institución burocrática, sino en una que abre las puertas para dinamizar la vida de los habitantes de aquí y que muestra el camino para preservar la condición de Patrimonio Mundial, de la cual la comunidad es la principal beneficiaria”.
A propósito, Arsenio Manuel Sánchez Pantoja, coordinador de la Red de Oficinas del Historiador y del Conservador de las Ciudades Patrimoniales de Cuba, significó que el principal desafío de la institución en Viñales es gestionar el desarrollo integral del valle, más allá de las cuestiones patrimoniales.
“Hay que generar un escenario económico que beneficie a todos y con la visión de que la cultura tiene que ser el eje principal del desarrollo y la comunidad, la principal protagonista de la obra”, subrayó.