El XXIV Congreso Nacional de Historia inicia hoy en la ciudad de Pinar del Río, a 80 años del primer evento de este tipo, efectuado en 1942 y presidido por el doctor Fernando Ortiz.
Promovido por la Unión de Historiadores de Cuba (Unhic), con el coauspicio del Ministerio de Cultura y su red de instituciones, la Academia de la Historia de Cuba, el Instituto de Historia de Cuba, la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, la Sección de Literatura Histórica y Social de la Uneac y el Centro de Estudios Martianos, el evento abordará múltiples temas entre los que se incluye la lucha por la independencia y la liberación nacional.
Distribuidos en cuatro comisiones, reconocidos investigadores de todo el país debatirán también sobre las transformaciones políticas y económicas, y los procesos culturales y educacionales en la etapa revolucionaria.
Además, las relaciones internacionales de Cuba, las expresiones diplomáticas, políticas, jurídicas, militares, y los problemas de la teoría y la enseñanza de la Historia.
Conferencias, intervenciones especiales, paneles y presentación de ponencias, tendrán lugar durante tres jornadas, marcadas por la presencia de varios premios nacionales de Historia.
Entre las actividades más llamativas del programa, destacan también los paneles relacionados con las deudas historiográficas en los estudios sobre la etapa de las guerras por la independencia y la república neocolonial.
Por su parte, el programa colateral se extenderá a otras sedes dentro de la capital pinareña y abordará, entre otros asuntos, la temática histórica en las editoriales cubanas, los estudios sobre el enfrentamiento a la contrarrevolución, y los problemas en la formación de profesores de Historia y la enseñanza de la asignatura.
Este tipo de eventos da continuidad a la tradición iniciada por los historiadores cubanos en la década de 1940.