Cruz Camacho Ríos

Nació el 14 de septiembre de 1923 en Quemados de Pineda, Cooperativa el Granma, en Minas de Matahambre. Sus padres fueron Fernando y Aurelia.

Tuvo poca suerte para alcanzar al menos un tercer o cuarto grados en la escuelita más cercana a su casita. La cuestión era que allí no había un maestro para asumir la enseñanza elemental de niños campesinos pobres como él.

Finalmente pudo, a duras penas, llegar a segundo grado, pero la labor principal del Niño Camacho, como era conocido, era cazar ranas en las lagunas para venderlas por algunos quilos, y cuando este negocio decayó tuvo entonces que dedicarse a cazar jutías para venderlas a diez o quince centavos cada una.

Así se hizo “hombrecito”, en medio del guataqueo y la recogida de tabaco durante largas e interminables doce horas diarias, ya con el padre fallecido por una enfermedad que soportó durante años y una madre envejecida por los maltratos de tanto lavar "para fuera" y carencias infinitas.

En los años 50 Antonio Núñez Jiménez estuvo en la zona y al llegar a su casa preguntó si había alguien que supiera de las cuevas, y la madre no dudó en explicarle que ella tenía un hijo muy conocedor de los alrededores. Así se puso en contacto el muchacho con el espeleólogo y, ante la necesidad de buscar a otros como él, le llevó ante la familia Malagón.

Pocos años después, soldados comandados por el tristemente célebre teniente de la dictadura batistiana Jacinto Menocal, llegaron a la casa preguntando inútilmente por el paradero de Núñez Jiménez. Torturaron al Niño y el cuerpo le recuerda persistentemente los golpes recibidos.

El 11 de Agosto de 1956, en una exploración realizada al hoyo de La Palma descubrimos por su extremo occidental una nueva boca de espelunca. En total la cueva de Niño Camacho tiene 154 metros de longitud.

La mayor alegría que ha recibido en su vida, fue el día que los doce expedicionarios del “Granma” les rindieron honores militares en Ciudad Libertad, a estos doce milicianos, al día siguiente de haber capturado a los bandidos.

En 1975 resultó ser el mejor obrero de la granja avícola El Moncada.

Recuerda el día que Núñez le dijo: “Mañana les voy a presentar a Fidel, mañana viene por aquí y se los voy a presentar para que lo conozcan personalmente”. Entonces al día siguiente Fidel vino, estuvimos hablando, y todos almorzamos juntos dentro de la cueva. Entonces Fidel se recostó después de almuerzo en un catrecito. Recuerda que todos acordaron llamar a la pequeña milicia: Patrulla “Granma”

Visitó a Ester, madre de los hermanos Saíz y le manifestó que se sentía muy orgulloso de ella; madre cubana, que había dado dos hijos valientes que les enseñaron el camino para ellos poder continuar la defensa de la Patria socialista, “siéntase satisfecha, que los Malagones, somos sus hermanos”.

Junto a Hilario y Juanito pudo compartir con los hombres que expusieron Las razones de Cuba, continuadores en otro contexto histórico de la lucha por la soberanía de su pueblo.

De Raúl recordará, que después de la desaparición de Camilo pasó a atenderlos y la entrega fue la misma, el respeto para todos Los Malagones nunca faltó en la dirección de la Revolución.

En lo personal, de sus gustos preferidos lo único que no le puede faltar es el café, no necesitó ni de ron, ni de cerveza jamás.

Estando en Santa Clara de visita al memorial del Che diría –Es el compañero más querido de la Revolución, nos enseñó a vivir y por su vida estábamos dispuestos también a dar nuestra sangre si nos llamaba. Aquí, junto a sus restos siento que he de vivir muchos años, el Che nos da vida, es el camino del ejemplo y el amor-.

De Fidel no olvidaría que una periodista le pregunta sobre el racismo en Cuba y Fidel le dijo –te equivocas, en Cuba no hay razas, sola una, hombres, todos somos la misma cosa.

“Fidel, hombres como Fidel las madres cubanas no paren otro, por su inteligencia y sus ideas para el bien de todo un pueblo el nuestro y los otros del mundo. Yo vi como vivía Fidel y lo abandonó todo por nosotros, por la libertad-prefiero morir yo primero, antes que él, mil veces y ojalá morir primero que Raúl también.”

Entre sus recuerdos sagrados, están las condecoraciones y medallas que lo distinguen como hombre de quehacer revolucionario. Llegó a ostentar el grado de Capitán.

Contrajo matrimonio con Esequia Mayor Padilla, tuvo 2 hijos. Su casa fue visitada por Alicia Alonso y a petición de Núñez Jiménez, fue guía junto a Eduardo y Leandro en la cueva de Santo Tomás. Luego de la misión de captura del cabo Lara trabaja como obrero en la granja avícola el Moncada. Durante 20 años miembro de los Órganos de la Seguridad del Estado. En 1981 se traslada a vivir a Viñales.

Iraida, hija de Cruz, comenzó a acompañarlo en sus últimos años a todas las celebraciones y aniversarios, incluidas las visitas al memorial del Che, Guanahacabibes, Casa Central de la FAR, cumpleaños de Esther Montes de Oca y cuenta entre sus experiencias, el respeto y admiración por los Malagones y sus familiares por la dirección de la Revolución Cubana, desde Fidel Castro Ruz hasta el presidente del Consejo Popular donde residen, motivo que la alienta en la creación del proyecto de La Nueva Milicia para preservar la historia de Los Malagones entre las actuales generaciones.

Falleció el 25 de enero de 2015

Condecoraciones recibidas:

- .Voluntarios internacionalistas de la libertad 1936-1939

- Producción y defensa

- 30 años de la victoria

- 28 de septiembre

- 23 de agosto

- 50 Aniversario de la victoria

- Antero Regaladov

- 20 años del desembarco del Granma

- Lucha contra bandidos

- 40 años de la victoria

- 19 de abril Recuerdo de su visita

- Vigilancia 20 años

- V Congreso de los CDR

- Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana.

- Lenin DDR NationalValksormerm.